Toledo, tierra de rica historia y paisajes cautivadores, enfrenta en la actualidad un desafío considerable: la proliferación descontrolada de conejos. La Consejería de Desarrollo Sostenible de Castilla-La Mancha ha intensificado sus esfuerzos para abordar la sobrepoblación de conejos en la región, reconociendo los riesgos que esta situación plantea para las cosechas de los agricultores.
En este artículo, exploraremos los detalles de esta plaga de conejos en Toledo, las medidas tomadas para controlarla y las preocupaciones planteadas por la comunidad agrícola.
La Consejería de Desarrollo Sostenible ha señalado la expansión preocupante de la población de conejos en la región, afectando a más de un millón de hectáreas y generando pérdidas económicas estimadas en 800 millones de euros. Este fenómeno, exacerbado por la sequía que afecta a la región, ha llevado a la declaración de comarca de emergencia cinegética temporal en 292 municipios de la Comunidad Autónoma.
La captura de conejos se ha convertido en una prioridad para la Consejería, especialmente en entornos donde la caza tradicional no es efectiva, como las lagunas de la Mancha. El uso de hurones y redes se ha intensificado en estas áreas para minimizar los daños en los cultivos, agravados este año por la falta de lluvias que ha afectado el crecimiento de las cosechas.
Durante el año 2022, en la provincia de Toledo se capturaron alrededor de 900,000 conejos, con un promedio de aproximadamente 50 ejemplares atrapados diariamente. El proceso de captura implica el uso de capillos para tapar agujeros y redes para rodear áreas específicas. Los hurones se introducen para mover a los conejos, atrapándolos en capillos o redes.
Después de la captura, los conejos son trasladados al Centro de Recuperación de Rapaces Ibéricas (CERI), ubicado en Sevilleja de la Jara (Toledo), o a refugios de fauna. Aquí, los conejos sirven como alimento para los linces, previa supervisión de un veterinario que aplica las vacunas preventivas necesarias.
Además de Toledo, se están implementando estrategias similares en otras zonas, como Ciudad Real, Cuenca y Albacete. Se están instalando mallas conejeras para prevenir daños en los cultivos y se está a punto de cerrar un contrato a nivel regional por medio millón de euros para instalar estas mallas en toda la región.
La captura de conejos enfrenta desafíos adicionales debido a las altas temperaturas en esta época del año. Por esta razón, se intenta concentrar el proceso durante las primeras horas de la mañana o al final de la tarde, cuando las condiciones térmicas son más favorables para las capturas.
La declaración de comarca de emergencia cinegética temporal ha permitido la captura del conejo de monte mediante hurón y capillo o redes, sin perro, hasta el 8 de febrero de 2024. A pesar de estas medidas, los agricultores afectados han expresado su frustración y preocupación por la insuficiencia de la caza para controlar la población de conejos.
Unión de Uniones de Castilla-La Mancha, junto a la Plataforma de damnificados por la plaga de conejos, ha convocado manifestaciones para exigir que se declare oficialmente la plaga de conejos en la región. Los agricultores reclaman soluciones más allá de la caza, como la gasificación de zonas con mayor densidad de conejos y la aplicación de medidas efectivas para frenar la sobreabundancia de esta especie.
Se estima que la plaga de conejos está causando pérdidas anuales de alrededor de 50 millones de euros a los agricultores de la región, afectando principalmente a cultivos de leñosos, almendros, olivar y vid. Unión de Uniones propone medidas compensatorias, incluida la exención de cumplimiento de condiciones de la PAC, la anulación de inspecciones y la exención de impuestos para las explotaciones afectadas.
La plaga de conejos en Toledo representa un desafío significativo para la agricultura y el ecosistema regional. La declaración de emergencia cinegética ha sido un primer paso, pero los agricultores y las organizaciones agrarias exigen medidas más efectivas y coordinadas para abordar la sobreabundancia de conejos.
Desde Control de Plagas Toledo, estamos seguros de que la declaración oficial de plaga y la aplicación de estrategias más amplias y sostenibles son fundamentales para restablecer el equilibrio y proteger la agricultura de la región.
